viernes, 26 de febrero de 2010

Otro jueves de fiesta para crecer en Europa

Cuando el 19 de agosto del año pasado, Forlán encarrilaba el pase a la liguilla de la Champions, con un zurdazo en la frontal del Spyros Louis para poner el 1-2, si alguien le hubiera dicho: “Cacha, frisando el mes de marzo no vas a haber metido ni un solo gol en Europa y no vais a haber ganado ni un solo partido”. El uruguayo hubiera respondido algo parecido a: “No jodás”.
Sin embargo, ése ha sido el devenir del Atleti en Europa en una Liga de Campeones nefasta que, por suerte, se ha producido este año, ya que de haberse desarrollado así el año pasado hubiera dejado tocada nuestra autoestima tras once años de ausencia.
Ni un gol del uruguayo (apenas dos del Kun y uno de Simao en seis partidos) y ni una victoria, nos hicieron caer deshonrosamente y sin merecerlo en la UEFA (ahora Europa League, ya saben, pero no me gusta el nuevo nombre). Sin embargo, una vez allí, hay que crecer en Europa y volver a recuperar un nombre que había caído en el olvido durante siete años en el viejo continente: Atlético de Madrid.

DEL INFIERNO DE ATENAS, AL DE ESTAMBUL
El buen partido de ida ante el Galatasaray se saldó con un inmerecido 1-1, y, del infierno de Atenas, nos teletrasportamos al de Estambul, seis meses mediante. Y allí volvió a sentenciar el Bota de Oro, Diego Forlán, para hacer justicia, con sufrimiento como siempre, en el minuto 89.
Como saben mis habituales, estoy haciendo este año un Master del que me está tocando escaparme algo antes a menudo (con gusto) por el buen hacer del Atleti en los torneos del KO.

ESCAPANDO DEL MASTER
Sin embargo, las siete no es algo antes (el Master es de cuatro a nueve) y cuando mis compañeros me vieron marcharme a eso de las seis y media recibí comentarios cómo: “No me lo creo”, “Claro, lo importante es lo importante”, o “es cuestión de prioridades”...
En cualquier caso, valió la pena. No lo valió tanto tener que tirarme 25 minutos buscando aparcamiento por la zona de San Bernardo (con los de los parquímetros atentos aún, como para aparcar mal...), y perderme la primera media hora.
Por la radio contaban que al menos el Atleti dominaba (lo cual volvía a confirmar al Galatasaray como menos fiero de lo que lo pintaban), pero Quique había vuelto a “apostar” por un solo delantero. Esta vez el turno fue para Agüero, pero, insisto, con un solo punta no se puede ganar un partido.

UNA BESTIA LE ROMPIÓ LA CARA AL KUN
Y sin compañía, al Kun le tocó partirse la cara en solitario una vez más. Y se la partieron de verdad.
En la ida, definí a la bestia de rizos y perilla, que ayer le propinó una patada en la cara a Agüero, así: “Especialmente cómico era el estilo de Servet, con el 76 a la espalda por si no se le ve, que a cada jugada te obsequiaba con un pase al contrario en la frontal, un resbalón, o un pelotazo a la grada estando sobre la línea de banda... contundente a la par que elegante, vaya”.
El animalito, que a lo largo de su vida debe hacer grandes esfuerzos para acordarse de respirar y tener cuidado a la hora de masticar para no ahogarse, de puro torpe cayó al suelo ante la presión del Kun, y, en su desesperación, propinó una patada en el mentón del argentino cuando éste porfiaba por mantener la verticalidad y robarle la cartera. El árbitro, a tres metros, no vio nada.

SIN AGÜERO NO HABÍA OPCIÓN... PERO ESTABA REYES
Con Agüero, mareado y contusionado, parecían esfumarse nuestras opciones de seguir en Europa. Salía Forlán, pero el partido, rancio y rácano, era para una genialidad.
Pero con el descanso se erigió un nuevo líder: José Antonio Reyes. Que el utrerano crece día a día es innegable, pero ver cómo es el que más lucha y el que se echa el equipo a la espalda, parece ya un libro de ciencia ficción.
En un eslalon desde la derecha se fue de tres, tiró una pared con Jurado, y, solo ante Leo Franco, intento rizar el rizo ante el argentino y éste, fiel a su destreza en los mano a mano, le ganó la partida.
Sólo tres minutos después, un saque largo de Asenjo se convirtió en asistencia y Reyes sacó astillas al larguero de tremendo derechazo.
El Atleti acallaba el Ali Sami Yen, que había apretado en la recta final del primer acto, e iba a tener premio.

LA ALEGRÍA DURÓ POCO
Un balón peinado por Jurado dejó solo a Simao tras un gran control orientado, y el portugués batió a su ex compañero con un perfecto remate por el palo largo: 0-1. 62 minutos, eliminatoria encarrilada.
Antes de ese gol, no paraba de repetirle a mi novia que marcar el 0-1 era fundamental, porque no veía capaz a los turcos de hacernos dos goles en media hora.
Cuando a los tres minutos del 0-1, Keita puso el empate, la cara de mi novia mirándome era un poema: “No tienes ni puta idea de fútbol”,
supongo que me quería decir esa cara.
Pero no me equivoqué. El Atleti tuvo más el control del partido, aunque no llegaba a portería. Mientras, Quique, como siempre, contemplaba impasible el espectáculo. Con un Jurado impreciso y un Simao desaparecido.

LA ENTROPÍA FUE ROJIBLANCA
Por fortuna, la entropía se alió del lado rojiblanco. El enésimo nudo sobre si mismo de Perea (un día se va a romper algo) dejó solo a Erkin ante Asenjo a falta de diez minutos. Parecía increíble, pero era real. Por fortuna, el colombiano sacó la manita desde el suelo para obstaculizar el disparo y el cuarto árbitro, o quinto o sexto, ya he perdido la cuenta, se hizo el sueco pese a ser italiano y estar a un metro.
El pobrecito de Caner Erkin se desquició ante tal desperdicio de salarios en el estamento arbitral, y más con la crisis que hay, y soltó dos patadas de roja a Jurado y a Valera que le costaron dos amarillas: a la calle.
Con el 1-1 y la prórroga asomando, uno dudaba si esperarla y sentenciar en la prolongación, ante el lógico mayor desgaste de un equipo en inferioridad, o intentar matar por la vía rápida.
Ante la nueva inmovilidad de Quique, Reyes respondió. El utrerano, cojo medio partido, se dio una última cabalgada horizontal oteando el horizonte y asistió a Forlán, que, tras un recorte, nos brindó el final feliz narrado al principio.
El Atleti está en octavos y el rival es el Sporting de Lisboa. Otro de los posibles cruces en agosto, cuando cayó el Panathinaikos. Todos los caminos llevan a Roma (a Hamburgo, este año). ¡Me gustan los jueves!

domingo, 21 de febrero de 2010

El Atleti no te arregla los findes

Ayer me junté con mi familia para celebrar el 84 cumpleaños de mi abuelo. Mi familia me felicitaba y me decía: Qué bien anda últimamente el Atleti, ¿eh? Ganar al Barça, el único que lo ha hecho...
Como comprenderéis, mi familia, excepto uno de mis tíos, de fútbol no sabe mucho.
Y yo tenía que explicarles que bueno, que sí, que ganamos al Barça y estamos en la final de Copa, pero que las eliminatorias no fueron muy complicadas y... bueno, todo eso que ya saben ustedes.
Mi abuelo nació en Almería y anda últimamente pachucho, con lo que juntarnos toda la familia le hizo mucha ilusión.
Por la noche, tuve fiesta de disfraces. Elegí “ser” David Bisbal, también de Almería, y en el concurso que se curró uno de mis compañeros de Master se decidió que el galardón al peor disfraz recayera sobre mí.
Después, acabé discutiendo con una de mis compañeras de Master, curiosamente, de Almería.
Y entonces llegó el domingo. Y el Atleti jugaba... contra el Almería.

DE MENOS A MÁS
Ni antes, ni durante el partido me puse a pensar en todas estas conspiraciones judeo-masónicas venidas del sur que me llevarían a padecer una nueva derrota del Atleti. Pero me ha dado por hilar las ideas ahora, frente a la pantalla del ordenador.
El partido en los comienzos fue anodino, como muchos de los que nos acostumbran los de Quique este año.
El equipo no tocaba mal, con Tiago dando salida con clase a las jugadas y Assunçao entonado. Pero no llegaba. Mientras, el Almería tuvo un par de oportunidades, en botas de Goitom y de Piatti, en las que, por suerte, Asenjo respondió bien (volvió a titubear en los balones aéreos, donde De Gea le saca un mundo).
En el tramo final del primer acto, los rojiblancos, hoy de negro, fueron creciendo, y Forlán tuvo dos claras ocasiones. La primera la mandó fuera por poco, y en la segunda su fuerte derechazo lo repelió Alves. El uruguayo volvió a moverse solo en punta, ya que Quique reservó nuevamente al Kun. El entrenador madrileño apostó de nuevo por Jurado como segundo punta, pero el gaditano no estuvo demasiado participativo, y sigo pensando que para ganar un partido se deben poner dos delanteros. Sin embargo, Quique no parece confiar demasiado en Ibra, ni en los que vienen detrás.

COMANDADOS POR REYES Y TIAGO
El Atlético confirmó la mejoría de los minutos finales, y en la segunda parte dominó el choque. Comandados por Tiago (a ver lo que tardan en pagar los ocho millones de euros antes de que vuelva por donde vino, como Banega...) y por José Antonio Reyes, un desconocido con respecto al futbolista que llegó al Atleti hace dos años y medio.
El utrerano hace jugadas increíbles
, con arrancadas desde medio campo en las que deja atrás contrarios con facilidad pasmosa. En una de ellas, se metió hasta la cocina, pero la pegó con la pierna mala y Alves respondió a corner.
Poco antes, el Almería había estrellado un cabezazo al larguero por medio de Chico, en la única llegada almeriense hasta la fatídica recta final.
Mientras, siguió el recital de Reyes. En pocos partidos he visto a un futbolista recibir más faltas en un mismo choque que a él. Debieron pararle de manera ilegal como en diez ocasiones. Sin embargo, tanta falta apenas se tradujo en tres tarjetas. Una de ellas para el propio Reyes por protestar... así es nuestro fútbol...
En una de esas infracciones, Reyes la pegó abajo para que despejara Alves, que voló milagrosamente para salvar el cabezazo posterior de Forlán cuando ya se cantaba el gol.
No tuvo suerte el uruguayo, que pocos minutos antes regateó a Alves tras un maravilloso pase de Tiago, pero su disparo lo sacó Chico en la línea.
La balanza se iba decantando del lado madrileño, y Tiago quiso redondear su noche con un trallazo a la escuadra. Pero lo escupió la madera.

Y CUANDO MÁS CERCA PARECÍA... GANÓ EL ALMERÍA
Y cuando uno iba haciéndose a la idea de que íbamos abocados a un nuevo empate injusto, el Almería renació... y se llevo el partido.
Primero fue un ex atlético, Ortiz, el que cabeceó fuera por poco. Después Piatti la pegó fuera. Y cuando Asenjo se estaba congraciando con una buena parada a tiro de Soriano, la jugada continuó... y marcó Piatti (1-0).
El argentino, que ya nos birló dos puntos en el descuento en el Calderón, nos amargó la noche y remató mi fin de semana.
Y es que, si uno espera este año que el Atleti le arregle un finde, está comprobado que no. Confiemos en que en la UEFA, que es jueves, den la talla y demuestren su superioridad ante el Galatasaray.

viernes, 19 de febrero de 2010

Entre palos anda el juego

Cuando Asenjo saltó anoche al campo del Vicente Calderón a falta de 20 minutos, recé para que no me lo pusiera fácil y me evitara comenzar con el título que acaban de leer.
Hasta entonces, De Gea, cuya trayectoria ha sido impecable desde que se hizo con el puesto (a excepción del error intrascendente ante el Racing), había tenido que hacer tan sólo dos paradas, una especialmente meritoria en el minuto 44, salvando con una gran estirada un cabezazo de Servet, estando frío, ya que los turcos no se habían acercado a la portería rojiblanca ni para saludar.
En la portería de enfrente, Leo Franco, al que se echó por la puerta de atrás en junio para dejar el camino libre de cualquier complicación a Sergio Asenjo, seis millones de euros mediante.
El argentino, ése que no salvaba puntos, había concedido un golazo de falta directa de Reyes por su escuadra en el minuto 23 (1-0), pero después, había salvado un cabezazo a bocajarro de Raúl García; un tiro a quemarropa del Kun; otra falta de Forlán; una brillante ocasión de Agüero, tras uno de esos recortes eléctricos suyos con los que rompe cinturas; y un nuevo libre directo de Simao, esta vez abajo.
El Atleti había hecho méritos más que suficientes para ponerse con un 2-0 que hiciera visitar Estambul con tranquilidad. Pero no fue así. Y saltó Asenjo.

LE PUEDE LA PRESIÓN
El portero de los mil millones
, ese cuyo representante se enfada porque en el contrato quiso incluir una cláusula que le garantizara la titularidad, saltó a espantar moscas en la primera ocasión en la que tuvo que intervenir. Su escorzo, estilo susto o muerte, se llevó por delante a Giovani (que sigue usando la misma marca de gomina que en el Barça) y, por fortuna, el balón que se colaba lo salvó Perea en la línea.
El prometedor inicio lo confirmó con sólo siete minutos sobre el campo, cuando un centro blando de Balta, que botó frente al área chica, fue bien acompañado con la vista por Asenjo, que comprobó cómo Keita tenía buena puntería para empujar a puerta vacía (1-1).
En los minutos finales, el Calderón premió la actuación del palentino con silbidos (fue recibido con una gran ovación) y especialmente sangrante me pareció su actitud en el último saque, ya en el descuento, al trote cochinero con un triste empate en casa...

EL ERROR VIENE DE ARRIBA
Pero no quiero cebarme más con el pobre Asenjo, y que conste que es un buen portero, aunque no está demostrando estar a la altura de la presión de una portería de primer nivel.
Mi opinión a este respecto ya viene de lejos, ya que sobre De Gea se lleva hablando desde que el chico iba a parbulitos, y la incompetencia de este asunto viene de más arriba. De esos que no se gastan un céntimo en organizadores porque dicen que no hay dinero (Banega vino cedido y se fue por donde vino, y veremos si no ocurre igual con Tiago), pero invierten siete millones de euros en dos porteros (Asenjo y Roberto), teniendo la solución en casa, pudiendo compaginar a un veterano fiable, con un chaval de esplendorosísimo futuro.

EMPATE INJUSTO
Lo triste de todo esto es que el Atlético, que hizo un partido más que correcto durante todo el choque, se va con un 1-1 bastante comprometedor para el caliente Ali Sami Yen (ya vimos cómo se las gastan los 1.500 turcos que visitaron el Calderón, con bengalas incluidas), donde los de Rijkaard apretarán bastante más que anoche.

UN GALATASARAY DECEPCIONANTE
Y es que el líder turco me decepcionó. Con un Arda Turam (10), su perla, que no sé si por venir tocado, pero ni apareció. Un Elano (9) que tampoco se vio si jugó o no, y tan sólo Kader Keita (11), de cuyo regate ya nos advirtió nuestro compañero turco Yigit Ozturk, puso en aprietos a Domínguez y compañía con su velocidad y sus dribblings.
En defensa, los chicos son más limitados que los nuestros. Verles intentar sacar la pelota jugada era como si Perea y Pablo (que sigue en el Atleti, oiga) se pusieran cada domingo a intentar rodar el anuncio de Nike en defensa. Estrambótico.
Especialmente cómico era el estilo de Servet, con el 76 a la espalda por si no se le ve
, que a cada jugada te obsequiaba con un pase al contrario en la frontal, un resbalón, o un pelotazo a la grada estando sobre la línea de banda... contundente a la par que elegante, vaya.
En el Atleti, al asentamiento de Reyes, que ya ha marcado un golito por competición, se le unió el debut de Salvio. Quique prometió que le daría minutos y no mintió: cinco. Al menos al chico se le vio desparpajo, porque encaró siempre que pudo, e incluso tuvo la última ocasión del partido.
En la vuelta, el próximo jueves, sólo el ambiente y el arbitraje (En Europa ya se sabe, y más fuera) podrían dejar fuera al Atlético. En lo futbolístico, el equipo español debería imponer la superioridad que mostró anoche.

miércoles, 17 de febrero de 2010

Un aficionado turco nos analiza al Galatasaray

Hay días en los que uno escribe su blog y piensa ¿para qué, si apenas nadie me va a leer?
Sin embargo, hay ocasiones en las que uno se lleva sorpresas agradables, y es el caso que hoy os traigo al blog.
El pasado mes de diciembre, cuando publiqué un análisis del Galatasaray turco al conocerse que era nuestro rival en la Copa de la UEFA, recibí en mi correo un mensaje en inglés.
El remitente era Yigit Ozturk, un joven turco aficionado al fútbol, que me escribía porque había descubierto mi blog. El motivo, es que es hincha del Fenerbahce, el equipo más laureado de Turquía junto al Galatasaray, y al conocer el resultado del sorteo me dijo textualmente: “Los enemigos del Galatasaray son nuestros amigos”.
Desde entonces, hemos hablado de vez en cuando a través del Messenger y el pasado lunes le propuse que me escribiera un pequeño artículo con el estado actual de nuestro rival de este jueves. Y éste es el resultado de lo que me escribió (o de mi traducción desde el inglés).
Él, nos ve favoritos. Esperemos que acierte.

EL ANÁLISIS DESDE TURQUÍA
“El Galatasaray es actualmente el líder de la Superliga turca con 46 puntos en 21 partidos. El conjunto de Rijkard no ha jugado partido de Liga esta semana, ya que su rival, el Ankaraspor, fue descalificado de la Liga.
El Galatasaray ha sido eliminado recientemente de la Copa turca por el Antalyaspor, tras ser derrotado por 2-1 y 3-2. A causa de esta eliminación, el entrenador holandés Frank Rijkard recibió muchas críticas por parte de la prensa.
La última incorporación del equipo de Estambul, Jo Alves (32), está lesionado y no jugará durante un mes, perdiéndose tres importantes partidos, los dos frente al Atlético de Madrid y el derby regional ante el Besiktas (el 21 de febrero).
El capitán Arda Turan (10), de sólo 23 años (el capitán más joven en la historia del Galatasaray), podría perderse el partido de Madrid al estar tocado, aunque los doctores del club están haciendo todo lo posible para intentar recuperarle de cara a esta importante cita. Sin embargo, si Arda Turan arriesga y juega en Madrid, podría perderse el derby ante el Besiktas del domingo.
Uno de los jugadores con más nombre del equipo, Milan Baros (15), lleva ausente tres meses por lesión, y, aunque se esperaba que pudiera reaparecer en el encuentro frente al Atlético, no llegará a la cita del Calderón.
Otro de los fichajes del Galatasaray, el mexicano Giovanni Dos Santos (30), está teniendo problemas de adaptación y no ha disputado los dos últimos partidos, aunque probablemente sí jugará en el Calderón.
En cualquier caso, creo que el problema principal del Galatasaray es Leo Franco (25), el ex portero del Atlético de Madrid. Ha tenido algunos fallos que han costado goles en las últimas fechas, aunque va a continuar siendo el titular indiscutible.
El Galatasaray tiene muchas bajas en ataque para este partido, con lo que Rijkaard podría deparar alguna sorpresa colocando de titular al joven Cem Sultan.
Emre Çolak (37) (de sólo 18 años) está jugando muy buenos partidos, logrando goles increíbles, y, aunque partirá desde el banquillo, podría jugar los últimos 20 ó 30 minutos.
Desde el lateral izquierdo, Caner Erkin (88) (que se hizo con la titularidad por la lesión de Hakan Balta -22-) está protagonizando atractivas actuaciones, con lo que el Atlético tendrá que tomar precauciones con este futbolista.
Una de las estrellas, el brasileño Elano (9), está desconocido, ya que alterna muy buenos partidos con otros muy malos. Pero el último encuentro, en Copa ante el Antalyaspor, rindió a un alto nivel.
Otro de los nuevos fichajes, Lucas Neill (12), jugará este partido en el lateral derecho. Aunque si Sabri Sarioglu es titular, Neill jugaría en el centro de la defensa con Servet Çetin.
Por último, hay que destacar a Abdel Kader Keita (11), el futbolista más peligroso del Galatasaray, junto al mencionado Arda Turan. Podría jugar en la delantera y el Atlético de Madrid debe tener cuidado con su desequilibrante dribbling”.

YIGIT OZTURK

lunes, 15 de febrero de 2010

La ilógica del fútbol

Contaba Fernando Torres en una entrevista al poco de llegar a Liverpool, que el 0-6 que el Barça infligió al Atleti hace tres años le hizo tomar la decisión de salir. Hasta ese día, Torres había vencido al Barcelona en varias ocasiones (dos en el Camp Nou y dos en el Calderón) siendo protagonista al endosarles hasta siete goles. Como explicaba el de Fuenlabrada, eran para él y para el equipo “pequeñas victorias en la temporada”, que les hacían pensar “que podían estar a un alto nivel si hacían las cosas así”. Sin embargo, esa trágica noche, Torres se dio cuenta de que "todo era una ilusión” y de que tenía “que seguir adelante”. Y huyó hacia delante.

EL ATLETI, PARADIGMA DE LA ILÓGICA
Que el fútbol no tiene lógica es algo que todo el mundo sabe. Y el Atleti es uno de los equipos que mejor lleva a la práctica este axioma.
La gente se hace eco del camino tan fácil que ha tenido hasta la final de Copa. Ha sido un camino fácil, sí. Pero si jugó con el Recreativo fue porque éste eliminó antes a un Primera como el Sporting. Y si jugó con el Celta es porque éste se cargó al Villarreal y al Tenerife.
Y, como bromeaba un día con un amigo, si el Atleti le metió 4-0 al Racing, y el Racing eliminó al Alcorcón, y el Alcorcón ganó 4-0 al Madrid... ¿le meterá el Atleti al Madrid 0-8 en el Bernabéu?
Pero el fútbol no funciona con este tipo de lógica...

NO TIENE MUCHA LÓGICA...
Que Perea lo corte todo y esté casi impecable no tiene mucha lógica. Que Assunçao se multiplique en medio campo, barra cada balón, regateé contrarios, y encima la saque jugada, no tiene mucha lógica.
Que Domínguez sea un mariscal en defensa, sea el jefe de la zaga, ordene y manda como un veterano, con sólo 19 años, no tiene mucha lógica.
Que Reyes se vaya de Iniesta y de Busquets, y ponga un pase en profundidad que ni Laudrup en sus mejores tiempos, no tiene mucha lógica.
Y que Forlán, en la primera que tiene, fusile sin piedad con la derecha a Valdés junto al poste derecho, este año, no tiene mucha lógica.
Sin embargo, todo eso pasó anoche en el Calderón. Y lo último que les he contado, la combinación Reyes-Forlán, en el minuto nueve (1-0).
Tampoco tiene demasiada lógica que pocos minutos después Agüero se quedara solo delante de Valdés, tras un gran pase de Simao, y con tiempo para pensar en regatearle, tirar a un palo, al otro... decidiera pasar a Forlán cuando el uruguayo estaba bien tapado por Puyol.

EL ATLETI CONTRA EL BARÇA SE TRANSFORMA
Pero no pasa nada. El Atleti contra el Barça se tansforma en un grandísimo equipo. Capaz de hacer cuatro goles si el contrario te hace tres. De pelear cada balón. De presionar al contrario en su propia área.
Y de ponerse 2-0 en el minuto 20. Simao mandó junto al palo de Valdés de manera magistral una falta perfecta para el perfil de un diestro. Segundo gol del portugués en Liga y segundo de falta, junto al de Copa.
En la celebración del tanto, no pude contener el comentario hacia mis compañeros de fatiga de ¿por qué nunca harán esto contra el Madrid...? Yo no me lo explico.
Y mientras le comentaba a mi padre que un 2-0 ante el Barça no es ni mucho menos decisivo... gol de Ibrahimovic (2-1).
Un corner peinado por Puyol en el primer palo (ya, ya sé que hablar de peinado y Puyol es una contradicción)
dejó solo a Ibra en el segundo poste para empujarla. El más cercano era Perea. Pero anoche era un día de fiesta y no es para quejarse y, así, el sueco pudo romper una sequía de dos meses.

CON DE GEA HAY MUCHO PORTERO
El gol dio paso a los mejores y únicos minutos de verdadero buen fútbol de los de Guardiola.
Tenía miedo en la previa (y lo anuncié) porque los últimos dos balones que “tocó” De Gea en Santander fueron dos goles (uno con fallo incluido). Con esa rémora, el Barça enfrente, y sólo 19 añitos para aguantarla, temía por la actuación de nuestro portero. Pero me equivoqué.
No sin antes llevarme un pequeño susto en la línea de mis presagios, cuando aún con 0-0 al niño se le colaba entre las piernas un balón fácil en el punto de penalti. Fue sólo un susto.
En el 31 blocó abajo un cabezazo de Ibrahimovic. En el 32 despejó un remate envenenado del sueco. En el 33 sacó un zurdazo de Messi y en el 45 volvió a detener un remate del argentino.
Fueron los minutos del Barça, y De Gea volvió a demostrar que tenemos portero de presente y de futuro.
Entre medias, Agüero remató al cuerpo de Valdés con la jugada anterior en la cabeza, cuando esta vez sí debió devolver la pared a Ujfalusi, que se había sumado al ataque con convicción.
El descanso fue bien recibido por la abarrotada parroquia local, y pocos podían esperar que el 2-1 no se movería hasta el final.

DOS TIROS DEL BARÇA EN LA SEGUNDA PARTE
Recién reanudado el choque, llegó a mi juicio la mejor ocasión blaugrana. Iniesta se plantó ante De Gea con Xavi a su lado, pero no controló bien y Perea salvó el peligro.
Fue el último acercamiento peligroso de los culés hasta el minuto 90.
Hasta entonces, fue el Atleti el que tuvo mejores ocasiones, maniatando a un Barça al que a falta de doce minutos los problemas se le multiplicaron cuando Xavi hubo de retirarse tocado.
Los rojiblancos supieron aprovechar las bajas culés, y mientras Reyes volvió loco a Maxwell por la izquierda (debió irse expulsado), Simao exigió al canterano Bartra por la derecha, que hubo de retirarse exhausto en el 15 de la segunda.
Agüero tras un recorte eléctrico a Puyol, y un zurdazo de Ujfalusi (mucho mejor de lateral) obligaron a Valdés a evitar el tercero.
Al final, sólo un arranque de furia de Messi hizo peligrar los puntos, pero su arrancada terminó con un disparo que se fue abriendo hasta perderse. Como el juego del Barça cada vez que visita el Manzanares.

EL BARÇA DE LOS RÉCORDS NO PUEDE CON EL CALDERÓN
Tras 22 jornadas, el Barça pierde su condición de invicto en el Calderón. Como el año pasado en la jornada 25, tras no haber perdido ni un partido desde la primera jornada. O como en 2006, cuando el Atleti de Torres ganaba a un Barça que, tras 15 victorias consecutivas, soñaba con batir el récord histórico de la Liga.
Y yo me pregunto, si el Atleti siempre gana en casa (cinco victorias, dos empates y una derrota) al doble campeón de Europa en los últimos cuatro años, y campeón de todo el año pasado... ¿no debería ganar el Atleti la Copa de Europa?
De momento, conformémonos con un partido similar el jueves ante el Galatasaray. Entonces, quizá se pueda soñar con hacer también algo grande en la UEFA.

viernes, 12 de febrero de 2010

El turno del Atleti, diez años después

Todavía recuerdo con estupor, como si fuera hoy, el momento en el que Raúl Tamudo metía la cabeza entre las manos de Toni Jiménez para petrificar a todos los atléticos y desnivelar una final que, estaba escrito, no iba a ser rojiblanca.

Corría el año 2000 y el mundo no se había acabado. José María Aznar había revalidado su Gobierno con mayoría absoluta; el Deportivo de la Coruña ganaba la primera Liga de su historia; comenzaba un novedoso programa bautizado como “experimento social” y presentado por Mercedes Milá, Gran Hermano; Schumacher conseguía su tercer Mundial de Fórmula Uno, el primero con Ferrari; en España entraba en vigor la nueva Ley de Extranjería; el Real Madrid ganaba su octava Copa de Europa, ante el Valencia; Telecinco estrenaba la serie Hospital Central; España levantaba su primera Copa Davis gracias a un joven Juan Carlos Ferrero; fallecía el actor y presentador Jesús Puente; el Atlético de Madrid bajaba a Segunda División, 70 años después...
Una década ha pasado desde entonces. Real Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Deportivo, Espanyol, Zaragoza, Mallorca o Betis han ganado algún título. Getafe, Celta, Recreativo, Osasuna, Athletic o Alavés han disputado alguna final.
El Atlético nada. Desde aquel gol de Tamudo los rojiblancos para ver un título de cerca han tenido que darse un paseo por el museo del club...

SUFICIENCIA Y DOSIS DE FRAGILIDAD
Esta noche, el Atlético de Madrid ha ratificado su puesto en la final de la Copa del Rey (previsiblemente el 26 de mayo en Mestalla o el Bernabéu, conmigo 'in situ'). Lo ha hecho con suficiencia, haciendo valer el 4-0 del gran partido de la ida, pero no sin ciertas dosis que nos recuerdan lo endeble de este conjunto.
A los dos minutos, las pesadillas de los más pesimistas se hacían realidad con un gol en propia puerta de Valera tras un corner. No podía ser, pero hemos visto tantas cosas en estos diez años...

COROCOTTA DURÓ SIETE MINUTOS...
Sin embargo, Agüero avisaba de que el Atleti no estaba para sustos dos minutos después y, en el siete, llegaba el empate.
Una falta bien sacada por Reyes tropezaba ligeramente en Moratón cuando Domínguez entraba al remate y el balón se alojaba en la red. 1-1. Fin de la eliminatoria. Muerto Corocotta. Adiós al espíritu del 11 de febrero.
La lectura que yo saco de esa falta es que siempre debe ser Reyes el que las ponga en movimiento, al igual que los corners. Su toque es mucho más envenenado que el de Simao, cuyo guante es mejor reservar para las faltas directas.
Con el 1-1, el Racing pegó un último coletazo en un remate de Colsa a centro de Christian. Fueron sus últimas señales de vida.
El dominio del juego era alterno, pero era el Atlético el que llegaba más, con un Reyes inspirado (sobrexcitado en exceso en ocasiones) y un Agüero clarividente, como siempre.
Ambos protagonizaron las dos ocasiones más claras, pero el primero la cruzó en exceso y el segundo remató a las manos del portero.

GOL DE JURADO Y PASEO
Con todo sentenciado, el Atlético quiso darse el lujo de ganar también en El Sardinero. Así, el Kun devolvió una maravillosa pared a Jurado, dejando solo al gaditano para que batiera a Mario con clase con el exterior de su diestra (1-2).
El Racing no tuvo otro remedio que tirar las hachas de guerra histriónicamente desenterradas y rendirse a la evidencia.
Entonces, ante un rival entregado, el Atlético tocó y tocó con sencillez. Fueron los minutos de Simao, que entró por el acelerado Reyes, de Raúl García, que saltó por Tiago, y de Ibrahima, que sustituyó a Agüero. Todos los relevos rondaron el gol.

"FINAL OFICIOSA", EMPANADA FINAL
Sin embargo, en el 89, cuando sólo los fantasmas de La Sexta hablaban de una “final oficiosa entre Atlético y Sevilla” o de un Racing “probablemente eliminado”, los santanderinos le dieron la vuelta al choque.
Un disparo lejano de Xisco se le coló por debajo del costado a De Gea, lo cual para nada afectó a la eliminatoria, pero tal vez sí a la moral de un chico con un expediente prácticamente inmaculado. Y justo en la víspera de recibir al Barça.
La empanada se prolongó durante un minuto, lo justo para que Antonio López perdiera un balón en defensa que Tchité prolongó hasta la red.
Al final, la derrota no siembra más dudas de las consabidas, porque la eliminatoria estaba más que solventada.

A SOÑAR...
Ya sólo queda desear un final tranquilo de Liga, esperar alguna alegría en la UEFA si los futbolistas ven en esta competición una vía de escape como la Copa, y soñar, soñar con esa final de Copa que a algunos nos deben desde que estábamos en el instituto y con un título que todos nos merecemos desde hace tanto... que ni me acuerdo.

lunes, 8 de febrero de 2010

Un punto para la permanencia

El Atlético de Madrid consiguió anoche en el Sardinero un punto positivo para lo que va a ser el objetivo rojiblanco de aquí a final de temporada: la permanencia.
Prácticamente sellado el pasaporte para la tan ansiada final de Copa del Rey, diez años después, el cometido del Atlético en la Liga será simplemente eso: permanecer. Permanecer, a ser posible, sin muchos altibajos, en lo que sea un transitar más o menos lineal y soporífero hasta el 26 de mayo, que sólo podría verse alterado con alguna alegría en la UEFA, si es que deciden tomarse el torneo europeo como otra tabla de salvación.

SOPOR Y PARSIMONIA
Hasta entonces, esta plantilla ha demostrado que lo que va a ofrecer en Liga es eso, sopor y parsimonia, ya que Europa cada vez está más lejos y los jugadores, fundamental, ya ni la miran.
El Atleti salió a empatar a Santander
y, contrariamente a lo que se suele decir, empató.
Con Forlán solo en punta (un equipo como el Atlético de Madrid no puede pretender ganar en ningún campo sólo con un delantero) y con tres mediocentros, por mucho que Raúl García apareciera volcado a la derecha.
De esta forma, el gol sólo podía llegar a balón parado o como llegó: en una gran conexión entre un pase clarividente, en este caso de Simao, y un desmarque acertado de Forlán (0-1- minuto 23).
El uruguayo la metió con suspense, ya que, tras superar a Coltorti, estaba más preocupado por empezar a celebrar el gol si el linier daba su permiso, que de ver si el balón definitivamente entraba.
Por suerte, tras golpear la pelota en el poste, aún fue más rápido que el defensa para remachar.
Hasta ese momento, fue el Racing el que tuvo más la pelota, aunque con escaso éxito, ya que la tónica eran las imprecisiones en uno y otro bando y el balón por arriba sin que nadie acertara/quisiera bajarlo.
Y es que el Racing quería, pero no podía, y el Atleti directamente ni quería.

NO SE PUEDE JUGAR CON UN SOLO DELANTERO
Vi con buenos ojos la suplencia de Agüero (una tarjeta le dejaba fuera del partido ante el Barça. Y un Atleti-Barça sin Kun es ya jugar a kamikazes), pero no entiendo ni entenderé que Quique no juegue con Ibra para tener dos delanteros.
Sólo con Forlán arriba, el Atleti no volvió a llegar en toda la primera parte y el Racing, que tampoco llegaba, aprovechó un regalo de Perea para empatar.
Un centro desde la derecha no fue despejado por el colombiano (que no sé si intentó controlar la bola, colándosele entre las piernas) y quedó franco para Gonzalo Colsa, que marcó con frialdad fuera del alcance de De Gea. El ex rojiblanco ya había avisado minutos antes y participó en todas las jugadas de ataque locales.

PEREA, PEREA...
Perea volvió a mostrar anoche por qué no debe jugar y por qué juega. Motivo de lo primero es el gol del Racing (y el del Málaga la semana pasada; y el del Madrid; y tantos otros que no son, pero están a punto de ser). Ejemplo de lo segundo es la jugada polémica del partido.
Tchité se planta solo ante De Gea, le supera y el balón se encamina a gol, pero la velocidad del colombiano sirve para sacar la bola en la línea y enviarla al poste. Lo comido por lo servido. Aún estamos a la espera de tener en el Atleti centrales que sirvan más que coman.
En la jugada, De Gea saca el piececito privando a Tchité de continuar y rematar estilo Forlán. Pero el árbitro no pita nada, con el consiguiente enfado de Tchité y de la grada.
Tener que escuchar a Miguel Ángel Portugal, diciendo que el árbitro estuvo “de puta madre” para el Atleti los dos partidos, jode. Pero con errores como el de ayer, hay que callarse. Y más si el resultado no es un 4-0.

SIEMPRE VEO EL FÚTBOL EN "BUENA" COMPAÑÍA...
Para colmo de males, me tocó ver el partido al lado de tres jóvenes aficionados del Racing. Sólo a mí me pasa ir a un bar a ver un Osasuna-Atleti y que la pareja de delante sea de los navarros. Anoche, repetí... ¿Tantos aficionados de Racing y Osasuna hay en Madrid...?
Tras la jugada controvertida, el Racing protestó mucho, pero atacó poco, y el partido transcurrió entre aburrido e infumable, sólo con la tensión dada por la grada y el avance del cronómetro hacia el final.
Ni la presencia del Kun, que sustituyó a un nuevamente mediocre Raúl García en el diez de la segunda, dio al Atleti más mordiente. Aunque eso sí, rozó el gol en dos ocasiones, en una a punto de aprovechar un error de la zaga cántabra, y en la segunda no llegando por poco a un centro de Simao.
Estas ocasiones llegaron en la recta final, donde el Atleti disfrutó de varios corners consecutivos que le acercaron a una victoria que tampoco buscó.
El jueves habrá que finiquitar el pase a la final en busca de un nuevo título 14 años después y, hasta entonces, vaticino pocas emociones de aquí al final de Liga. Eso sí, el domingo viene el Barça, y ésa siempre es una atracción excitante.

viernes, 5 de febrero de 2010

¡Y salió el 4 Negro!

Si alguna vez han jugado a la ruleta (yo lo he hecho y no se lo recomiendo) sabrán que apostar a un número concreto de los 36 (37 con el cero) es muy arriesgado. Si ya es difícil apostar rojo o negro, par o impar, y que salga, imagínense cuando sólo tienes una opción de las 37.
Como proclamaba en mi crónica anterior, el Atleti decidió jugárselo todo al 4 (de febrero) Negro (siendo la Copa del Rey, no va a ser rojo...). ¡Y salió el 4 Negro!

JUGAR CON AGÜERO ES HACER TRAMPAS
Pero es que el Atleti hace trampas
. Al parecer, los rojiblancos son de esos jugadores que le ponen un imán a la ruleta, para que salga el número que quieren. Se hacen los despistados en las tiradas anteriores (llámese Liga), pero cuando llega su ronda, ahí se lo juegan todo.
El imán del Atleti se llama Sergio Leonel Agüero del Castillo y todavía estoy esperando que anuncien la renovación de su contrato con una cláusula de 200 millones de euros.
Y es que jugar con él, es hacer trampas. Es abusar, tener un tío que es capaz de que le metan dos hachazos dos futbolistas rivales y todavía se lleve la pelota. Es abusar que haga un eslalon por la derecha y se la ponga a Simao para que la reviente. Es abusar que rompa por dos veces a Torrejón hasta volverle loco y obligarle a hacerle penalti. Es abusar ver cómo se para, juega andando y la pone donde quiere, porque el rival no le entra porque ¡¿pa qué?! Si saben que no se la van a quitar.
El Atleti y Agüero demostraron desde el minuto uno que quieren llevarse esta Copa, y el Kun lanzó lamiendo el poste apenas comenzado el choque. Poco después, un corner era rematado al palo por Tiago. En cinco minutos, habían llegado más y más claro que en muchos partidos completos de Liga este año.

SIMAO, EJEMPLO DEL ATLETI BIPOLAR
Y el inicio arrollador tuvo su premio en el minuto nueve, cuando el citado eslalon del yerno de Dios fue rematado de volea maravillosa por Simao Sabrosa cerca de la escuadra.
El portugués es el claro ejemplo del Atleti bipolar de este año: tres goles en cinco partidos de Copa, apenas uno en 20 de Liga.
El Racing intentó sacudirse del bofetón inicial, pero los rojiblancos no se echaron atrás como acostumbran. Era un equipo desconocido, hilvanando jugadas de más de siete y ocho pases, con Tiago como director de orquesta (lo reitero, aleluya, un acierto en invierno), con Assunçao enorme un día más, y con Simao y Reyes ayudando en medio campo.
Y cuando el Racing se acercaba y centraba, daba gusto ver a De Gea descolgando balones, como cuando al niño alto que es, le pide una señora de baja estatura que le alcance algún producto de los estantes más altos del super mercado. A cada parada que hace, me tiro más de los pelos por los mil millones tirados en Asenjo. No porque sea malo, sino porque no hacía falta. Y lo sabían, lo sabían desde que el chaval tenía 14 años...
El Atleti rozó el segundo en un disparo de Forlán lamiendo el palo, y cinco minutos después, en el 40, llegó el segundo. Una vez más la jugada la inició el Kun, que se fue de tres e intentó irse de todo el Racing. En la frontal le pararon y del rebote se aprovechó Simao, que centró al área donde nadie despejó y el balón llegó a Reyes, que fusiló el 2-0. Es su segundo tanto como rojiblanco. Lástima que tuviera que marcharse después lesionado, aunque tenía una amarilla por una de esas entradas que hace cuando todavía se le cruzan los cables...

LO MEJOR NO FUE EL BOCATA
Con el 2-0 pude degustar con mi padre y mi novia el delicioso bocata de pollo, mayonesa y pimientos que nos había hecho esta última. En la previa, aventuré mi esperanza de que el bocadillo no fuera lo mejor de la noche. Por suerte no me equivoque, y los de rojiblanco estuvieron a la altura. Exquisitos.
La segunda parte continúo en la misma línea. Primero Tiago buscó el gol con un zurdazo fuera tras jugada individual, y después Simao remató una falta indirecta nuevamente a la madera. “Hay que sentenciar aquí”, le dije a mi padre. Y lo hicieron.

ESE PENALTI BUENO
Ayudó un poquito Mateu Lahoz, que pitó un penalti por una entrada de Toni Moral a Jurado que yo, desde mi asiento en el segundo anfiteatro del Fondo Sur (a más de cien metros), vi claramente que fue fuera del área. Pero no nos vamos a escandalizar ahora por regalos que cada año vemos le caen al Madrid o al Barça.
Forlán no perdonó, y la pegó impecable junto al palo derecho.
“Ladrones, un metro fuera”, me escribió mi amigo madridista Mario.
Diez minutos después pude responderle “¿Este también un metro fuera o qué?”, cuando Torrejón cazó a Kun de importencia tras el enésimo quiebro. Forlán nuevamente no falló y puso el 4-0 y el pasaporte a la final.
Los tres mil cántabros (yo diría que más) que abarrotaron el Calderón se fueron calientes a casa, justo castigo al “Atleti, Atleti, Atlético de Madrid, mierda”, que se tiraron cantando toda la primera parte.
También hubo recuerdos en la hinchada para el “Puta Sevilla”, futuro rival en la final, que, al parecer, se tiraron insultando al Atleti todo el partido del miércoles en el Sánchez Pizjuan. Nos temen, y esa es buena señal.

CORTANDO RÉCORDS NEGATIVOS
En 2007 el Atleti rompió con siete años sin viajar por Europa; en 2008 con once sin dejarse ver por la Champions; en 2010 vamos a acabar con diez años sin una final.
Espero que esa misma noche, en Valencia o donde sea, y haré todo lo posible que conmigo en el estadio, el Atleti acabe con esa otra cifra negativa que tanto duele y pesa: catorce años sin un título.
Esta Copa es mía, y me la pienso beber. ¡A su salud!

lunes, 1 de febrero de 2010

Juéguelo todo al 4 Negro

Allá por el mes de noviembre, y visto el comienzo de Liga, ya éramos muchos los que señalábamos la Copa como la competición en la que invertir nuestros esfuerzos (algunos hablaban de tirarla...), con el equipo en los últimos puestos.
Meses después, los rojiblancos están en semifinales y, tras la derrota de Getafe, volvía a reafirmarse que este año en el torneo de la regularidad penaremos más que disfrutar (por algo se llama de la “regularidad”...).
Sin embargo anoche, no era un partido para tirarlo.
El Kun en el banquillo, bien (aunque como nos preguntamos mi padre y yo, ¿cuándo descansa Forlán? A sus 30 años, con su alarmante estado de forma/ ánimo/ chispa y habiendo padecido un esguince de tobillo); Reyes también fuera, bien.

¿QUIÉN NECESITA AHORA LOS PUNTOS?
Y el Málaga enfrente. Al borde del descenso. Necesitado de puntos, decían. Hoy, a sólo tres puntos de los rojiblancos. ¿Quién necesita puntos ahora?
El Atleti empezó como tantas veces, por debajo en el marcador recién salido del vestuario. Como contra el Celta... y el Oporto... y el Madrid...
Gámez deja en evidencia a Antonio López (menuda primera parte del capitán. Y miren que sufro cuando le veo hacerlo mal) y la pone al segundo palo, donde la carrera de Duda deja a Simao como una abuelita cruzando la carretera (mi abuela cruzaba la calle con más valor y más intensidad) y pone el 0-1.
Cuando busqué con la vista a Ujfalusi para saber por qué no estaba en su sitio le encontré en la banda, fuera del campo, siendo atendido.
Se puede hablar de mala suerte, pero también es cierto que la jugada fue calcada a la del gol en Getafe.

NI JURADO, NI CAMACHO...
Y una vez más, el Atleti con un resultado adverso. Con Perea regalando balones en lo que se ha convertido para él en un estado de ansiedad constante. Con Jurado perdiéndola en cada lance y haciendo falta en cada disputa. Con Camacho desperdiciando su enésima oportunidad. Con Forlán sin estar en sí. Y sólo Ibrahima, corriendo como un galgo para arriba y para abajo; buscando con la mirada a un compañero que nunca aparecía para que le apoyara en la presión; y dejando detalles en controles, sombreros, y un disparo con mucha intención, pero con pocos visos de gol, que se marchó al lateral de la red. Fue el primer tiro a puerta del Atleti. Era el minuto 30...
Antes, el Málaga había llegado en un par de ocasiones con peligro (Fernando y Caicedo rozaron el gol), disfrutando de corners, y tocando siempre como si jugara con 12. ¿Por qué? Porque cuando el Atleti iniciaba la presión el Málaga ya había hecho seis pases entre hombres solos. Y eso es conceder muchas ventajas.
Antes del descanso, un tiro a bocajarro de Camacho que se encontró Munúa, una falta desviada de Simao, y un remate desde 20 metros de Forlán cuando estaba solo -solo- para encarar puerta, fueron el único bagaje, que le hizo a uno encarar el vomitorio “contento” visto lo visto en la primera media hora.

LA CABALLERÍA NO FUNCIONÓ
Agüero y Reyes saltaron como el séptimo de caballería en la segunda parte. Incomprensiblemente, el argentino lo hizo por el meritorio Ibra y no por la sombra de Forlán. Y como comenta Aitor, compañero de butaca y de fatigas, qué triste que el Kun tenga que saltar a arreglar un partido contra el Málaga...
Su primera intervención fue un intento de marcharse de tres con el que acabó en el suelo dentro del área. Pero Mejuto le mostró tarjeta. Era esperanzador, pero fue efímero.
El Kun lo intentó como siempre, pero es que era el Málaga el que tenía el balón. La sensación de que jugaban con 12 predominó todo el choque, y los de Quique no veían más que camisetas blanquiazules cuando la pelota, casualmente, pasaba por sus pies.

OTRO GOL DE POEMA
Y así llegó el 0-2, en otro poema. Baha gana línea de fondo gracias a un saque de banda ¡desde medio campo! La pone al área y allí aparece Perea, que despeja al centro dejando el balón franco para que Javi López pusiera la puntilla.
Tres minutos antes, Quique había retirado a Antonio López por Raúl García, dejando una línea de tres en defensa, y desierta la banda por la que llegó el gol.
Igual la culpa de todos los males no siempre la tiene Perea...
Ya con todo resuelto, sólo una volea cruzada de Jurado (lo único salvable que hizo en un choque funesto), un zapatazo lejano de Agüero y varias jugadas de frontón en el área vislumbraron un 1-2 que hubiera metido algo de miedo a la afición malacitana desplazada al Manzanares, que se lo pasó en grande.

RIVALES DIRECTOS Y TODO AL 4 NEGRO
La victoria del Málaga es la cuarta de toda la temporada: dos de ellas frente al Atlético y la primera fuera de casa. Todo dicho.
Con su triunfo, los de Muñiz se convierten en un rival directo para los rojiblancos por la permanencia.
Como el Racing de Santander (próximo rival en Liga), que con su puntito en Getafe ya nos supera en la tabla.
Pero pocos estarán pensando en ese encuentro liguero, ya que lo han apostado todo al 4 (de febrero) Negro (por aquello de ser la Copa del Rey, supongo que no será Rojo...). Ese día el Calderón estará lleno, de gente y de ilusión. Pero ojo, otro mal resultado puede hacer estallar la ruleta por los aires. Todo el patrimonio del año está allí. Así lo han elegido.