martes, 28 de febrero de 2017

La mala educación

ATLÉTICO 1-2 BARCELONA
Goles: Godín; Rafinha, Messi. 
El domingo en el Vicente Calderón se dieron varios ejemplos de mala educación o de comportamientos que resultan inapropiados tanto dentro como fuera de un terreno de juego.
En el ámbito deportivo, y en el futbolístico en concreto, hay un juez designado como parte encargada de denunciar y sancionar estas acciones inadecuadas: el árbitro. El problema se agrava cuando el juez es el primero en cometer este tipo de actos y, por ende, puede fomentar esas conductas inoportunas en el resto de actores.

MATEU LAHOZ FOMENTA LA MALA EDUCACIÓN
En el caso que nos ocupa el juez de la contienda tiene nombre y apellidos: Antonio Miguel Mateu Lahoz. Considero que no me equivoco demasiado si afirmo que se trata del colegiado en activo más conocido en estos momentos, lo que creo que tratándose de una profesión como la arbitral (donde la mejor noticia es pasar desapercibido) no es la tarjeta de presentación más recomendable.
Si se le presupone algo positivo al colegiado valenciano es que es un árbitro "que deja jugar", un juez al estilo de la liga inglesa, que no interrumpe el juego por cualquier mínima infracción y que permite que el fútbol sea fluido, ya que no aplica el reglamento al mínimo roce. Prueba de ello es su media de faltas por partido esta temporada: 28.
Pues bien, este domingo Mateu se superó con creces. En un partido en el que creo que cualquiera coincidirá en señalar que no fue bronco señaló 42 faltas: 14 a favor del Atlético, y 28 para el Barça...
Una vez más, y ya son demasiadas, Mateu hizo lo necesario para erigirse en protagonista. Sus diálogos con los futbolistas interrumpiendo el encuentro son tónica habitual, y especialmente paradigmático fue uno (en la foto) en el que abroncó a gritos durante varios segundos al defensa blaugrana Umtiti por haberse dejado caer en una disputa en el área atlética. Mateu, si considera que un jugador finge, menos charlas y más tarjetas. Esos gritos son de mala educación.

EL TEATRO DE VARIOS FUTBOLISTAS CULÉS
Por desgracia, actuaciones como las de Umtiti son frecuentes en el equipo culé. Es norma ver a futbolistas como Neymar exagerando hasta la desesperación (del rival y de la afición contraria) cada vez que recibe (o considera que recibe) una falta.
Otros, como Rafinha, protagonizaron acciones histriónicas más propias de las tablas de un teatro, sobre todo cuando el marcador les acompaña.
Por no hablar de cómo rodean al árbitro en determinadas jugadas que consideran que no les favorecen o para reclamar tarjetas. Un ejemplo es cómo Piqué y Luis Suárez cogieron a Mateu en túnel de vestuarios para que les explicara, otra vez, por qué había anulado el gol de Suárez en el que se la llevó con la mano.
Todo este tipo de comportamientos son costumbre en Can Barça y, por desgracia, son un síntoma de mala educación.


LA BRAVUCONERÍA DE LUIS ENRIQUE
Los desplantes de Luis Enrique con los medios de comunicación son ya tan sonados que se ha llegado a especular con que hasta pudieran costarle el puesto.
Aunque en el ejemplo que voy a citar puede que no le falte razón, el técnico asturiano quiso hacer sangre con la decisión de Simeone de que el césped estuviera algo más lento de lo habitual. Luis Enrique aseguró que el estado del campo benefició al Barcelona en los dos goles (El 0-1 de Rafinha llegó tras seis rebotes ¡Seis!) y que, además, perjudicó al Atlético en una contra en la que Griezmann se emparejó en carrera con Umtiti. Supongo que también favorecería a los rojiblancos en alguna oportunidad.
Lo dicho, sin entrar en que pueda tener razón, aprovechar el resultado para intentar menoscabar las disposiciones del rival es de mala educación.

Y PIQUÉ...
Mención aparte merece la figura de Piqué. Vaya por delante que el defensa catalán no me genera animadversión. Que nunca me he mostrado crítico con sus declaraciones polémicas o con sus salidas de tono en diversos aspectos.
Sin embargo este domingo fue capaz de sacar de quicio a una de las personas más respetuosas y pacientes que conozco: mi padre. Sus exageradísimas pérdidas de tiempo en los minutos finales, cuando le tocó sacar de banda como lateral ya con el 1-2, desesperaban a un santo. "Vale que pierda tiempo, pero que encima no se mofe", protestó mi padre cuando veía a Piqué acercarse con parsimonia a cada saque de banda, pedir sitio, levantar el balón con los pies, y tomarse toooodo el tiempo del mundo para ponerlo en juego. Como digo, no me cae mal el 3 barcelonista, pero sin duda es un ejemplo de mala educación.

Todo este tipo de comportamientos, sumados, hicieron que más de un aficionado colchonero saliera del Vicente Calderón diciendo frases de esta índole: "Mira que me caen mal los vikingos, pero últimamente le estoy cogiendo el mismo asco al Barça"...

NO TODO VALE...
Quiero aclarar que con este artículo no pretendo insinuar que el Barça ganara por el árbitro, ni por el teatro de sus futbolistas, ni por la bravuconería de su técnico, ni por las pérdidas de tiempo de Piqué... Pero sí que en el fútbol, como en la vida, no todo vale, que en Atletis-Barça precedentes hemos visto provocaciones o agresiones muy censurables de algunos jugadores (como Luis Suárez) que no han tenido castigo, que por delante de todo debe estar el respeto al prójimo, al compañero, que las malas artes pueden funcionar en momentos puntuales, pero que a la larga se encuentran inevitablemente y de frente con la reprobación de todos.
El Barça eliminó al Atlético de Madrid de la Final de Copa del Rey siendo inferior al conjunto rojiblanco en tres cuartas partes de la eliminatoria; y este domingo se llevó los tres puntos cuando lo más justo habría sido un empate ante un Atlético que, como mínimo, fue tan merecedor de la victoria como los culés y que durante muchas fases del encuentro dominó el juego.
Pero, como siempre dice Diego Pablo Simeone, "el trabajo paga"; y este Atleti nunca deja de creer... ni de trabajar. El tiempo pondrá a cada uno en su sitio...  

viernes, 3 de febrero de 2017

Estamos vivos, no tengan ninguna duda

SEMIFINALES- ATLÉTICO 1-2 BARCELONA
Goles: Griezmann; Luis Suárez, Messi.
La frase no es mía, es de Diego Pablo Simeone en los micrófonos de Gol al acabar el Atleti-Barça.
"Estamos vivos. Me quedo con el segundo tiempo, la reacción, la constancia, la presión, las situaciones de gol y sobre todo cómo se entregaron. Mientras se entreguen así estamos siempre cerca de cualquier cosa", afirmó el argentino. Entonces, el entrevistador repregunta: "Me quedo con esa frase: estamos vivos. Están vivos para el partido de vuelta, ¿no?".
"No tenga ninguna duda, que hay partido. Seguro que hay partido", contesta el Cholo con su convencimiento habitual y con una media sonrisa, entre pícara y desafiante.

EL CAMP NOU TE ASFIXIA
Pues estamos vivos. Yo también me quedo con esa frase. Quiero quedarme, pese a la enorme dificultad (seamos sinceros, está casi imposible) que entraña remontarle un 1-2 en el Camp Nou al Barcelona. En su estadio, el Barça es un equipo que te asfixia, te acorrala, te encierra y te martiriza en tu área hasta que consigue su objetivo. Lo hemos vivido en todas nuestras visitas en los últimos años en las que se ha aguantado siempre, mejor o peor, pero nunca se logró un triunfo. Los mejores resultados, tres empates 1-1: en Liga de este año; el ya histórico que nos dio el título con el cabezazo de Godín; y otro 1-1 más esa misma temporada en Champions, golazo de Diego Ribas mediante.

ONCE AÑOS SIN GANAR ALLÍ
Curiosamente este domingo se cumplirán once años de nuestra última victoria en el Camp Nou. 1-3, con un doblete del entonces Niño en todos los sentidos y otro gol de Maxi. El año anterior se había vuelto a ganar, 0-2, con otro doblete de Torres. Eran otros tiempos. Mucho peores, sin duda. Aunque esos triunfos ante el Barça nos ayudaban a no olvidar que éramos un equipo grande (Un grande sin memoria, ¿recuerdan? En esos años nació este blog...).
Ahora lo somos. No hace falta recordarlo ni mirar atrás. Pero antes del partido les avisaba en Esto es Atleti ("Volver a ser un equipo hijoputa") de que si de fútbol se trataba, ellos tenían unos cuántos tíos cuya técnica podía destrozarnos. Y así lo hicieron.

LA CLASE DE SUÁREZ Y MESSI NOS DESTROZÓ
Para nuestra desgracia hubo que esperar poco. A los seis minutos Mascherano roba un balón abajo a Griezmann, Luis Suárez recoge la bola en campo propio... y lo deja en nuestra portería. Entre medias, una carrera de casi 50 metros en la que primero sortea a Godín y después deja atrás a Savic con un autopase antológico, para terminar una jugada pletórica de clase y potencia con una definición sutil a la izquierda de Moyá (0-1). Empezar perdiendo tan pronto en una eliminatoria, ante un rival de la entidad del Barça, no era precisamente buen presagio.
No se descompuso, sin embargo, el Atleti. Respondió pronto con un cabezazo Godín (del que dos personas me dijeron en la previa que marcaría. No pudo ser); y los rojiblancos apretaron arriba a un Barça que se vio obligado en demasiadas ocasiones a combinar con su portero. Mascherano y Piqué tuvieron que emplearse a fondo para sacar balones peligrosos en ataques colchoneros.
Pero el Barcelona en las contras daba miedo. Temblamos especialmente en la grada cuando cerca de la media hora Neymar hizo una pared con Luis Suárez (tras llevarse un rebote en un mal despeje de Saúl. No tuvo su día); y terminó rematando flojo y fuera en una ocasión franca.
 
No fue tan franca la que tuvo Messi minutos después. Pero el argentino no las necesita claras. En el minuto 33, el 10 blaugrana se saca un zurriagazo tremendo que me hizo resoplar según lo vi salir, y que se fue abriendo hasta pegar en el palo y entrar cerca de la escuadra (0-2).
El Barça no había hecho méritos para ponerse con dos goles de ventaja, pero cuando cuentas en tus filas con tamañas bestias del mundo del fútbol, ¿quién necesita acumular méritos?
El Atleti sí que se descompuso después de este segundo mazazo, y los minutos que transcurrieron hasta el descanso fueron un funeral en el campo y un sinfín de lamentaciones en la grada: nos habíamos quedado sin semifinal en media hora.

HOMENAJE A LUIS ARAGONÉS
Pero el Cholo tenía otros planes. En el día en el que se cumplieron tres años de la muerte de Don Luis Aragonés Suárez (DEP, leyenda), Simeone debió dar una charla en el descanso que habría sido digna del Sabio de Hortaleza. Bonito homenaje del argentino, que estuvieron a punto de culminar en el césped los once de rojiblanco.

GRAN PARTIDO DE FERNANDO TORRES
Que la segunda parte iba a ser otra historia se les notaba a algunos con sólo mirarles los andares. De primeras, los de Torres, que saltó al campo por Vrsaljko, volviendo Juanfran a su posición de lateral. Creo que no me equivoco si digo que el Niño completó sus mejores 45 minutos de la temporada (que, todo sea dicho, está siendo muy floja).
A los cinco minutos, asistió de tacón a Gabi y sólo un cruce providencial de Jordi Alba evitó el tanto; a los 20, un centro suyo lo remató de chilena Carrasco; a los 35 conectó un precioso remate de espuela, a centro de Filipe, que se perdió lamiendo el poste... El Niño se mereció el gol, pero no lo encontró.

EL ATLETI RESUCITÓ
Antes del cuarto de hora, una falta colgada por Gabi la puso Godín de cabeza en el área chica y allí apareció Griezmann, ganando a Mashcerano, para cabecear el 1-2. Había partido. Había que creer. Y la afición creyó. Con todas sus fuerzas.
Sólo cinco minutos después, gran pase profundo de Koke, pase de la muerte de Filipe, y remate de Griezmann que salva a bocajarro Cillessen.
El partido era de una intensidad incalculable, las acciones se sucedían una tras otra a una velocidad de vértigo, la presión del Atleti era tal que al Barça le costaba salir de su propio campo. Pero cuando salía, volvía a asustar.
Así, dos disparos de Andre Gomes y de Messi (de falta) obligaron a Moyá (que completó un gran partido) a hacer sendos paradones, el segundo extraordinario, con la ayuda del travesaño.

MERECIERON EL EMPATE
Nunca dejaron de creer los colchoneros. Y merecieron su premio cuando en el 85 Gabi atacó a Mascherano como una locomotora, se la robó por detrás, la pelota llegó a Torres, y el Niño armó un disparo rápido (se precipitó) y la mandó a la derecha de Cillessen. Debió ser el empate. Habría sido de justicia.
El Atleti murió en el área culé, y todavía acumuló dos disparos más que se perdieron silbando (Griezmann y Gameiro). Pero no hubo remontada.

SI ELLOS NO DEJAN DE CREER...
No la hubo, y tendrá que ser en Barcelona. Son once años sin ganar allí. Nunca lo ha hecho el equipo del Cholo. Pero si ellos nunca dejan de creer, no seremos nosotros quienes lo hagamos. Veo altamente complicado que logremos eliminar al Barça, pero sí tengo claro que los blaugranas tendrán que sudar sangre para llegar a esa final. Estamos vivos, no tengan ninguna duda. Tendrán que matarnos allí...

miércoles, 1 de febrero de 2017

Jose I. Fernández ficha por "Esto es Atleti"

"Sí, señores, el rumor está en la calle y no me queda otra que confirmarlo: he fichado por Esto es Atleti", fueron las primeras palabras de José Ignacio Fernández al hacer oficial su traspaso por la prestigiosa página de información 100% rojiblanca "Esto es Atleti".

"Como muchos grandes amores, nuestro idilio ya venía gestándose años atrás. Pero hasta ahora siempre había habido flecos que habían impedido que se cerrara el traspaso por unas u otras circunstancias", confirmó el periodista madrileño, reconociendo que ya temporadas antes había habido acercamientos con "Esto es Atleti".

Las cifras del fichaje no han trascendido, pero por lo que apuntan fuentes bien informadas, la operación podría haberse cerrado a cambio de unas cuantas buenas palabras y muchas dosis de cariño.

"En Esto es Atleti somos selectivos y siempre buscamos calidade", manifestó Ricardo A. Menéndez, Ricky, editor de Esto es Atleti, preguntado por la llegada de Jose I. Fernández.

ILUSIONADO CON LA NUEVA EXPERIENCIA
Dejando a un lado metáforas de este mundillo futbolístico que tanto nos apasiona, la noticia es ésa, sí, ficho por Esto es Atleti. Palabras como las de Ricky (esa parte no era ficción) le hacen a uno sentirse orgulloso de poder formar parte de la familia de "Esto es Atleti".

Como todo el que me siga ha comprobado, mi frecuencia de publicaciones ya no es la que era. El trabajo, problemas personales, y el ver que el blog en muchas ocasiones no alcanzaba la repercusión que a uno le gustaría, me han hecho descuidar un tanto la crónica obligada (con mucho gusto) que tiempo atrás no faltaba con ni un solo partido, ya fuera de Liga, Copa, Champions, UEFA o Intertoto.

UN GRANDE SIN MEMORIA SEGUIRÁ VIVO
El blog no muere aquí, ni mucho menos. Seguirá latiendo, pero no lo hará al ritmo frenético que en otras épocas. Ahora, para palpitar conmigo a menudo deberán seguirme también en Esto es Atleti. Mi estreno con ellos fue hace dos semanas con un también metafórico "Hoy, yo me apunto a pasar frío al Calderon". Una reflexión sobre la "nueva" afición del Atleti, a caballo entre el partido del Betis en Liga y el encuentro de cuartos de Copa con el Eibar.

Hoy, repito artículo de opinión con "Volver a ser un equipo hijoputa". Una previa del Atleti-Barça muy particular, que les invito a leer en Esto es Atleti.

¿QUÉ Y QUIÉNES SON ESTO ES ATLETI?
Esto es Atleti nació en el año 2010 de la mano del mencionado Ricky junto a otros cinco locos del Atleti. De ellos, sólo Ricky continúa casi siete años después, pero a él se le han unido un elenco de diez personas fijas (cuatro editores, dos reporteros gráficos, tres redactores del primer equipo, uno del Atleti B y otro del Féminas), más tres colaboradores, entre los que ahora me encuentro.

UN MEDIO DE INFORMACIÓN ROJIBLANCA DE REFERENCIA
Desde ese ya lejano 2010 el crecimiento cada año ha sido exponencial: en publicaciones, en número de seguidores y en trascendencia, hasta el punto de haberse convertido en un medio de información del Atlético de Madrid de referencia.
No son sólo palabras. Con más de 20.000 seguidores en Twitter (donde es medio online verificado como oficial), llegó a casi 430.000 páginas vistas el año pasado y lleva creciendo desde 2013 a una media que supera el 30%.

Por todo ello y mucho más, que no se puede medir con cifras, por la calidad de sus contenidos, el mimo con el que se preparan y el sentimiento, siempre rojiblanco, que desprenden, fichar por Esto es Atleti es para mí un tremendo honor. Y esto tampoco son sólo palabras. Ya lo dice la descripción de la web: "El sitio de los que compartimos un sentimiento, una pasión y un orgullo: Atleti".

Gracias a Ricky, en quien personalizo todo esto porque siempre ha sido él quien me ha llamado para ficharme. 
El Atleti es mi vida. Siendo así, era normal que acabara en "Esto es Atleti".
Seguro que éste es el comienzo de una bonita amistad. Les invito a compartirla con nosotros.